El funcionario provincial insistió en que «lo barato sale caro», al referirse a la política de no inversión. «Ahorrar ahora en el mantenimiento va a salir mucho más caro después. Se están destruyendo las rutas y eso tiene un costo de vidas y también un costo económico para el país», explicó.
Katopodis también marcó una profunda contradicción en las políticas de Javier Milei. «No hay plata para la obra pública, no hay plata para las universidades públicas, pero sí hay plata para bajarle los impuestos a los más ricos y para ponerle un tope al salario de los trabajadores», criticó, poniendo en relieve las prioridades del actual Gobierno nacional.
El Ministro provincial afirmó que la demanda por la reactivación de la obra pública es un clamor extendido. «No es solamente un reclamo del Gobernador Kicillof, es un reclamo de los transportistas, de los que viajan, de todos los argentinos», sostuvo, subrayando que la paralización de estas obras afecta a todos los sectores.
Finalmente, Katopodis concluyó que el «abandono de la obra pública» se ha convertido en un «símbolo claro» de la diferencia entre el modelo de gestión nacional y el bonaerense, y que también representa el «fracaso del plan económico» del Gobierno central: «El Gobierno nacional tiene que entender que no se puede construir un país sin inversión en infraestructura. Es fundamental para el desarrollo, para la generación de empleo y para la seguridad de nuestra gente».